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sábado, 12 de febrero de 2011

Historia de dos ciudades, de Charles Dickens

Historia de dos ciudades. Charles Dickens
Recientemete terminé de leer "Historia de dos ciudades", de Charles Dickens, y tengo que decir que Dickens es un narrador extraordinario que dota a sus obras de una magnífica ambientación. Esto es algo que ya había constatado en la lectura de otras obras suyas, como "David Copperfield", "Oliver Twist" o "Almacén de Antigüedades", pero el estilo de estas novelas me hacía pensar en un Dickens centrado en la crítica social, narrando
historias oscuras y vidas miserables. Sin embargo, en "Historia de dos ciudades" Dickens pulsa otra melodía.
La trama de esta novela histórica tiene lugar en Londres y París, las "dos ciudades". Es la época en la que la Revolución Francesa comienza a caminar. El libro consta de tres partes:
  • La primera parte cuenta la liberación de un hombre, el doctor Manette, por intermediación de la poderosa Banca internacional Tellson, que envía a su representante Jarvis Lorry a hacerse cargo del rescate. Preso injustamente en la Bastilla casi 18 años, tras ser liberado el doctor se reencuentra con su hija Lucía y se trasladan a Londres.
  • La segunda parte arranca con el juicio a un presunto espía de Francia, Charles Darnay, que es salvado gracias a la intervención de Sidney Carton, un singular personaje que colabora con el abogado Stryver. Las vidas de todos estos personajes se entremezclan y los sentimientos florecen de diversas formas. Mientras tanto la Revolución sigue su curso en Francia, la Bastilla es tomada y París se convierte en una ciudad muy peligrosa para vivir. Con el país en plena convulsión Charles Darnay se ve forzado a regresar.
  • En la tercera parte, en la época del Gran Miedo, con la guillotina a pleno funcionamiento, Darnay es capturado y juzgado. Sin embargo el doctor Manette, reconvertido en héroe nacional, interviene para salvarle. La historia acaba cuando, tras lo que denomina su "desordenada y extraviada vida", Carton finalmente encuentra un sentido, una utilidad y un propósito que compensen haber malgastado su existencia previa.
"Era el mejor de los tiempos, era el peor de los tiempos, la edad de la sabiduría, y también de la locura". Así comienza su relato "Historia de dos ciudades". Resulta conmovedor observar como en medio de circunstancias tan terribles existen personajes tan sensibles y tan preocupados por procurar el bienestar a sus seres queridos.
Por otra parte, el relato de la situación que se vivía en la gestación y nacimiento de la Revolución me recuerda poderosamente a los hechos que se están viviendo actualmente en Egipto y los países limítrofes. El levantamiento del pueblo oprimido, harto de años de ser pisoteado. El caos organizado, rebosando todos los estratos sociales. La muerte, siempre presente...
Tal vez convendría recordar lo que la historia nos enseña, lo que vino tras la Revolución en Francia: el Gran Miedo, el Terror, y tras las luchas intestinas...el golpe de estado de Napoleón y la concentración del poder en sus manos mediante el establecimiento de un gobierno autoritario.
Y tal vez convendría recordar que el norte de África no es Francia.

2 comentarios:

  1. ¡Qué interesante tu comentario de este libro! Yo siempre habia tenido ideas algo preconcebidas de Dickens hasta que leí "Grandes esperanzas". Desde entonces lo considero uno de los grandes escritores de la literatura victoriana. Hace un tiempo empecé a leer "Los papeles póstumos del club Pickwick". Y como dice un personaje de "Cranford": "Os desafio a que no os riais a carcajadas"

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  2. Supongo que en esto, como en tantas cosas, es cuestión de seguir probando. A ti te ha pasado como a mí, seguiste hasta que leíste la novela adecuada, y entonces tu perspectiva cambió. Gracias por compartirlo.

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