Sagunto, turismo cargado de historia

Castillo de Sagunto, vista de la puerta y plaza de Almenara

Hace unos meses estuve haciendo una visita turística a la Sagunto histórica y es muy recomendable. El problema es que no existe una adecuada infraestructura turística para obtener ni siquiera una pequeña porción del caudal de historia que jalona los diversos rincones del pueblo/ciudad. Ni hay suficiente información disponible, ni existen visitas guiadas de confianza, ni el patrimonio histórico-cultural se halla suficientemente cuidado.

No obstante todo lo anterior, Sagunto tiene tanto que ofrecer que, aunque se esforzaran en ocultarlo seguiría estando presente.
Sin duda lo más llamativo de Sagunto y su seña de identidad es el castillo y el teatro romano, y las impresionantes vistas que se obtienen de los alrededores. En un día despejado incluso se puede ver Valencia.

Teatro Romano (s.I  EC)

No se queda atrás todo el entorno del castillo y el teatro con la Judería,

Vista de la Judería

las antiguas ermitas, el muro del templo de Diana

Muro del Templo de Diana (s.II a EC)

el Patio de los Arcos de la Casa de los Berenguer,

Patio de los Arcos (Casa de los Berenguer)

o un tramo de la Vía Augusta en la plaza de la Antigua Morería.

En la subida al Castillo se puede visitar el Museo Epigráfico donde contemplar diversas piezas arqueológicas, como el Toro Ibérico del s.IV a. EC...

Toro Ibérico (s.IV a EC)

Pero en cualquier rincón de Sagunto podemos toparnos con la historia cara a cara como el capitel Jónico del s.II a.EC que encontramos en la Plaza de la Peixcateria

Capitel Jónico (s. II a EC)

o las magníficas gárgolas de la Iglesia de Santa María, del s.XIV.

Gárgola de la Iglesia de Santa María (s. XIV)

Sagunto, donde Aníbal se hizo un nombre dando comienzo a la Segunda Guerra Púnica, es historia de categoría especial.